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El Síndrome de Stendhal: Cómo la Conexión Inesperada de Ozuna y Beéle Resultó en la Colaboración del Año
¿Qué pasa cuando un oso se une a un gorila? En la naturaleza, esta coexistencia sería improbable y riesgosa, dadas sus diferencias biológicas y de hábitat. Pero en el universo musical, la unión de Ozuna (quien ha representado la vibra del oso desde su álbum Odisea) y Beéle (quien ha adoptado la imagen del gorila) ha resultado en todo lo contrario: un álbum inesperado y electrizante llamado Stendhal,,.
Lo que teóricamente no debió funcionar se transformó, entre viajes, música y sesiones de estudio improvisadas, en un universo compartido que dio vida a esta producción.
Cuando el Arte Supera la Planificación
El origen de esta colaboración fue pura casualidad y química. La conexión inicial se dio a través de la remezcla que Ozuna hizo de la canción tropical de Beéle, “Frente al Mar,” apenas dos meses después de su lanzamiento en diciembre de 2024. Ozuna se hizo fan de Beéle inmediatamente después de "Frente al Mar". Aunque Ozuna tiene 33 años y Beéle 23, el artista puertorriqueño reconoció un talento raro en el joven de Barranquilla, afirmando que "chicos como este, diría yo, nacen cada 100 años".
El plan original no era ni un álbum ni un EP. Empezaron grabando "Liberal," la cual se suponía que sería su única colaboración, pero luego llegó "One and Only". La idea de hacer un álbum surgió cuando se dieron cuenta de que ya tenían ocho o diez canciones. Beéle recuerda que la primera noche juntos, hicieron cerca de ocho tracks. Este proyecto es una prueba de que "las cosas salen mucho mejor cuando no se planean".
Nacido Bajo la Luna Naranja de Ibiza
El concepto de Stendhal se fraguó en un viaje a Ibiza,. Fue allí, bajo una luna naranja intensa que iluminaba el mar, que nació el nombre y la estética del proyecto,,.
En medio de una noche de conversaciones, los artistas se toparon con el concepto del síndrome de Stendhal: esa sensación abrumadora que puede desencadenar el arte, que provoca que las manos suden o se sienta un nudo en la garganta,. Para Beéle, conectar este síndrome con la música encajaba perfectamente porque "nuestro arte es simplemente ser nosotros mismos".
Curiosamente, el número 5 se convirtió en un símbolo que guio todo el proceso,. La fecha de lanzamiento del álbum fue el miércoles 5 de diciembre, completando el círculo simbólico del número,. En total, terminaron haciendo 15 pistas.
El Proceso Creativo: Disfrute y “Peligro”
El proceso de creación fue fluido y sin desafíos creativos, según Ozuna. Ozuna aprendió de Beéle a no pensarlo demasiado y simplemente hacerlo. De hecho, el álbum es un testimonio de su química; en el estudio, Ozuna lanzaba una idea y Beéle otra, fluyendo naturalmente.
Este espíritu espontáneo llevó a que "todo lo que hicimos fue dentro de los parámetros del peligro", como bromeó Beéle,. La historia más legendaria de la grabación ocurrió en Ibiza, cuando casi los expulsan de la isla. Luego de terminar el dembow “Te Culié” a las 7:00 de la mañana, estaban tan emocionados que lo escucharon unas 50 veces con un altavoz gigante en la piscina, lo que provocó que un vecino llamara a la policía.
El álbum está lleno de referencias inesperadas que mantienen esa vibra de "rebeldes":
• "Ale": Representa la noche para ambos artistas y se abre con una línea icónica de la serie Pablo Escobar: El Patrón del Mal,.
• "Te Culié": Fue la canción más rápida de hacer, y es un dembow que samplea la icónica “Aserejé” de Las Ketchup,.
• "Enemigos": Incluye un sample del clásico "Enemigos" de Aventura.
Más Allá de la Música: Amistad y Aprendizaje
Para Ozuna, trabajar con Beéle, a quien considera una buena persona y un músico increíble, representa "un nuevo comienzo y un nuevo desafío musical",. Se lleva consigo la consistencia de Beéle en el trabajo y en mantener su música a un alto nivel.
Por su parte, Beéle admira que Ozuna, a pesar de sus años de carrera, prioriza la diversión. Beéle siente que hacer este álbum fue "algo mágico" que le enseñó a confiar, y afirma que son más que colegas, son hermanos.
Ambos artistas están seguros de que esta no será la última vez que trabajen juntos. Sobre una posible gira, siguen fieles a su filosofía: no lo planean, porque si lo planean, "no fluye igual". Así que, ¡estén atentos! Como dice Ozuna, harán lo suyo, y lo verán.
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En esencia, Stendhal es como un flashmob creativo: un evento espontáneo y poderoso que te agarra por sorpresa, demostrando que la mejor forma de hacer arte es simplemente sintiéndolo y dejándolo salir.
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