Ticketmaster y Live Nation enfrentan nuevos desafíos legales por la tecnología SafeTix
Ticketmaster y su empresa matriz, Live Nation, están nuevamente bajo escrutinio legal, esta vez por el uso de la tecnología de códigos de barras rotativos en el sistema de venta de boletos digitales SafeTix. Las compañías están siendo demandadas por EChanging Barcode LLC, que alega que el sistema de códigos de barras de Ticketmaster infringe su tecnología patentada, diseñada para prevenir la captura fraudulenta de boletos mediante captura de pantalla.
SafeTix, que utiliza códigos de barras dinámicos que se actualizan cada pocos segundos, se introdujo como una medida de seguridad para combatir la falsificación de boletos y la reventa no autorizada. Sin embargo, esta tecnología se ha convertido en el centro de múltiples batallas legales. Además de la nueva demanda por infracción de patente, Ticketmaster y Live Nation ya enfrentan un caso antimonopolio en curso por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
El caso del Departamento de Justicia alega que la tecnología SafeTix no solo busca detener el fraude, sino que también se utiliza para sofocar la competencia en el mercado de reventa de boletos. Los críticos argumentan que, al restringir cómo y dónde se pueden transferir las entradas digitales, Ticketmaster prácticamente ata a fans y artistas a su propio ecosistema, limitando el acceso a plataformas de reventa alternativas.
La demanda de EChanging Barcode añade una nueva capa de complejidad a una situación ya de por sí tensa. La empresa alega que el método de código de barras rotativo de Ticketmaster viola directamente su propiedad intelectual y exige una indemnización por infracción de patente.
Para colmo, la demanda antimonopolio también señala el dominio de Live Nation, que, según se informa, controla la venta de entradas de aproximadamente el 80 % de los principales recintos de Estados Unidos. Este poder de mercado, según la demanda, presiona a artistas y promotores para que utilicen los servicios de Live Nation, consolidando aún más su control sobre los eventos en directo.
A pesar de estos crecientes desafíos legales, Ticketmaster y Live Nation han negado haber cometido ninguna irregularidad. Su intento de desestimar el caso fue rechazado recientemente, y el juicio está oficialmente programado para marzo de 2026.
A medida que estos casos avancen, podrían tener importantes repercusiones para el futuro de la tecnología de venta de entradas, la autonomía de los artistas y la libertad de elección del consumidor en la industria de los eventos en vivo. Tanto los fans como los artistas y las plataformas independientes de venta de entradas seguirán de cerca el desarrollo de la siguiente fase de esta crucial batalla legal.

Publicar un comentario