Más allá de las reproducciones: Descubriendo el mundo oculto de los ingresos por composición
Has puesto toda tu alma en la creación de una canción. Por fin está disponible, acumulando reproducciones en Spotify y Apple Music. Ves cómo los pagos de los distribuidores llegan poco a poco, testimonio del crecimiento de tu base de fans. Pero ¿te has parado a pensar si ese es el panorama completo? Para muchos artistas, especialmente para aquellos que se mueven en la escena musical independiente, una parte importante del pastel financiero podría estar sin reclamar: las regalías editoriales.
Si bien los distribuidores desempeñan un papel vital para llevar tu música a las plataformas digitales y recaudar las regalías de masterización (el dinero generado por la propia grabación de sonido), son solo una cara de la moneda. La otra cara, a menudo pasada por alto, es la publicación, que se ocupa de la composición musical subyacente: la letra y la melodía. Aquí es donde existe una fuente de ingresos completamente nueva, y comprenderla puede ser un punto de inflexión para los compositores.
Imagina que tu canción suena en una cafetería, aparece en una película o incluso simplemente se transmite por streaming. Cada uno de estos usos genera regalías editoriales. Estas regalías no las recauda automáticamente el distribuidor. En cambio, se gestionan y distribuyen a través de un sistema complejo que involucra a las sociedades de gestión de derechos de autor (SGA), como ASCAP, BMI y SESAC, así como, potencialmente, a una editorial musical.
Aquí es donde entran en juego los acuerdos editoriales tradicionales. Grandes discográficas como Sony, Warner y Universal suelen ofrecer estos acuerdos, que pueden adoptar diversas formas. Un acuerdo editorial completo suele implicar que el compositor ceda los derechos de autor de sus canciones a la editorial, quien asume la responsabilidad de la administración, la promoción y la recaudación de regalías. A cambio, la editorial suele obtener una parte significativa de los ingresos editoriales.
Un acuerdo de coedición ofrece una estructura ligeramente diferente. En este caso, el compositor conserva una parte de las regalías de la editorial, convirtiéndose esencialmente en copropietario de los derechos editoriales. Comprender los matices de estos acuerdos es crucial para que los compositores se aseguren de recibir una compensación justa por su trabajo.
Los derechos de autor de una canción se dividen fundamentalmente en dos partes: la parte del compositor y la parte de la editorial. Las regalías de ejecución, generadas cuando tu canción se interpreta públicamente (incluido el streaming), se dividen entre estas dos partes. La parte del autor suele ir directamente al compositor a través de su entidad de protección de derechos (PRO), mientras que la parte de la editorial la recauda esta (si existe) y luego se distribuye según los términos de su acuerdo con el compositor.
Para los músicos independientes que no han firmado un contrato editorial, navegar por este panorama puede ser un desafío. Sin una editorial dedicada a rastrear y reclamar activamente estas regalías, sus ganancias pueden terminar fácilmente en la temida "caja negra": un fondo común sin reclamar en poder de las PRO. Esto significa que, incluso con una audiencia considerable en streaming, muchos artistas independientes podrían estar perdiendo ingresos significativos simplemente por desconocer o no tener acceso a sus regalías editoriales.
Entonces, ¿cuál es la conclusión? Si bien subir tu música a plataformas de streaming es un primer paso crucial, comprender las complejidades de la publicación musical es igualmente vital para los compositores. Explorar opciones para gestionar tus derechos editoriales, ya sea mediante la afiliación directa con una PRO o mediante un acuerdo editorial, puede generar un flujo de ingresos significativo y garantizar una compensación completa por tu trabajo creativo. No dejes que las regalías que tanto te costó ganar se pierdan en la caja negra: toma el control de tu publicación y asegura tu futuro financiero como compositor.
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