Para los productores y artistas de hoy, el panorama es irreconocible comparado con el de hace apenas un par de décadas. Abe Batshon, CEO de BeatStars, recuerda comprar ritmos en línea a mediados de los 90, cuando el proceso estaba "fundamentalmente roto". Se enviaba un pago y luego había que esperar días, a veces semanas, para que llegara un CD físico con los archivos de estudio. Batshon señala que "la creatividad no funciona con ese tipo de plazos", ya que la inspiración surge instantáneamente.
BeatStars nació con la visión de arreglar este sistema, creando una forma más rápida y justa para que los artistas accedan a los ritmos y para que los productores finalmente sean dueños de su obra.
Una Nueva Economía: El Poder de la Independencia
Hoy en día, BeatStars ha desempeñado un papel fundamental en la transformación de la forma en que se licencian, compran y venden ritmos a nivel mundial . La plataforma cuenta ahora con más de 11 millones de ritmos en su mercado, con 1,5 millones de descargas mensuales.
Sin embargo, el dato más impresionante refleja el empoderamiento financiero de sus usuarios: BeatStars ha pagado más de 400 millones de dólares a creadores de todo el mundo. Batshon destaca que esto es mucho más que una simple cifra; representa "alquileres pagados, préstamos estudiantiles saldados, trabajos abandonados y familias enteras sustentadas gracias a la música".
La música de BeatStars se ha convertido incluso en lo que Batshon denomina "la banda sonora de esta era", impulsando éxitos virales en plataformas de vídeo corto [5, 7]. La plataforma fue la fuente del beat del megaéxito mundial de Lil Nas X de 2019, Old Town Road, y 82 temas producidos por miembros de Beatstars Publishing han llegado al Billboard Hot 100.
El ecosistema completo para creadores
BeatStars ya no es solo un mercado de beats. Bajo el liderazgo de Batshon, ha evolucionado hasta convertirse en lo que él describe como un “ecosistema completo”. Hoy en día, funciona como:
Un estudio en la nube.
Un centro de negocios.
Una editorial y agencia de derechos.
Una comunidad para construir carreras sostenibles.
El objetivo final de Batshon es que BeatStars sea conocido como el “centro global para el emprendimiento musical”, el lugar donde los creadores pueden gestionar su arte desde el principio, abarcando la creación, la protección, la distribución y la monetización.
Navegando la Transformación de la IA: Innovación y Protección
La industria musical está experimentando una profunda transformación debido a la IA, pero BeatStars está afrontando este desafío de frente con un enfoque dual.
BeatStars está comprometida con la innovación a través de colaboraciones, como la que mantiene con la plataforma de creación musical con IA Lemonaide, que ha ayudado a cientos de miles de creadores a generar nuevas ideas con mayor rapidez. Al mismo tiempo, protege la propiedad intelectual de los creadores. Se asoció con Sureel para evitar el entrenamiento no autorizado de IA en el catálogo de BeatStars.
Batshon sostiene la firme convicción de que no es necesario elegir entre innovación y protección; se pueden lograr ambas. Esto implica demostrar cómo se implementa una IA ética, por ejemplo, garantizando que los modelos se entrenen únicamente con música de productores que voluntariamente participan y reciben una compensación.
De cara al futuro, la IA se concibe como un mecanismo de apoyo que se convertirá en copiloto del creador, ayudándolo con la mezcla, el diseño de sonido y la masterización, en lugar de reemplazar el elemento humano del gusto y la emoción.
El auge del creador-emprendedor
Una de las principales tendencias de mercado que Batshon identifica es el auge del creador-emprendedor. Los artistas y productores de hoy en día buscan ser dueños de sus negocios, diversificando sus ingresos mediante sincronizaciones, licencias y membresías. Esta democratización implica que un joven productor que sube su primer beat compite en igualdad de condiciones con una superestrella que lo licencia.
Esta independencia ha transformado la dinámica con las discográficas tradicionales, pasando de una relación de dependencia a una de colaboración. Las discográficas reconocen que el próximo gran éxito podría surgir en BeatStars, y los creadores ahora tienen la capacidad de elegir la independencia como la opción más inteligente y rentable.
Para tener éxito, Batshon aconseja a los productores que "Traten su arte como un negocio". Los productores constantes que construyen una marca reconocible y comprenden el marketing, la publicación y los derechos son los que prosperan.
Toda esta estructura se basa en una misión clara: ayudar a un millón de creadores a ganarse la vida a través de la plataforma. Ese objetivo, afirma Batshon, es su "guía", que orienta cada colaboración y producto que desarrollan.
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> El modelo de negocio de BeatStars está diseñado para esta alineación, cobrando solo una pequeña comisión por las ventas y obteniendo la mayor parte de sus ingresos de las suscripciones, lo que garantiza que si sus creadores no prosperan, la empresa tampoco [15, 19]. El sueño de Batshon es la máxima equidad: un pago instantáneo y transparente para cada creador, independientemente de su ubicación o tamaño.
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