A partir del 8 de septiembre, los pasajeros de la MBTA que sean detenidos sin comprobante de pago se enfrentarán a nuevas medidas de control destinadas a frenar la evasión de tarifas, anunció la agencia de transporte esta semana.
Bajo esta política, a los pasajeros que sean detenidos por un agente de gestión de tarifas se les solicitará primero una identificación. Si no tienen una identificación, se les pedirá su nombre e información de contacto. La primera infracción resultará en una advertencia formal por escrito, sin sanción económica.
Sin embargo, las infracciones reiteradas conllevarán multas monetarias. Una primera, segunda o tercera citación conllevará una multa de $50, mientras que una cuarta o subsiguientes resultarán en una multa de $100, informó la MBTA.
Esta política marca un cambio del enfoque de la agencia, que prioriza la educación, a uno que introduce sanciones progresivas por evasión de tarifas. Los funcionarios afirman que la iniciativa está diseñada para promover la equidad entre los pasajeros y, al mismo tiempo, ayudar a la MBTA a abordar la pérdida de ingresos.
Los agentes de gestión de tarifas (personal de la MBTA con uniformes distintos a los de los agentes de policía) se incorporaron inicialmente como parte del programa de transformación de tarifas de la Línea Verde y los autobuses. Su función se centra en verificar las tarifas, brindar asistencia y, ahora, garantizar el cumplimiento mediante multas.
La MBTA no ha revelado cuántos inspectores de tarifas se desplegarán en todo el sistema, pero los funcionarios enfatizaron que el objetivo es fomentar el pago en lugar de sancionar a los pasajeros.
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