"A Mechanical Joey" de Bill Orcutt tendrá una reedición en 2025: Voz Humana vs. Lógica de Máquina
En 2025, "A Mechanical Joey", uno de los lanzamientos más enigmáticos y conceptualmente audaces de Bill Orcutt, recibe una esperada reedición: una ocasión trascendental tanto para los fans de la música experimental como para los coleccionistas. Publicado originalmente en el sello discográfico de Orcutt, Fake Estates, el álbum es a la vez una continuación y una disrupción: profundiza en la filosofía sonora que comenzó a desarrollar con su aplicación de código abierto de programación en vivo, Cracked, a la vez que evoca el fantasma del punk con un cameo espectral de Joey Ramone.
Para quienes no lo conozcan, Bill Orcutt se dio a conocer con la feroz banda de noise-rock Harry Pussy en los 90, antes de desaparecer de la música durante más de una década. Regresó en 2009 con "A New Way to Pay Old Debts", un álbum crudo de guitarra acústica solista con influencias blues que redefinió el sonido de la improvisación libre: sin filtros, inmediato y casi salvaje. Durante años, su estética fue férreamente analógica: física, espontánea, alérgica a todo lo sintético.
Pero esa postura evolucionó en 2016, cuando lanzó Cracked, un entorno minimalista de programación en vivo que se asemeja más al bloc de notas de un hacker que a una estación de trabajo de audio digital. No hay interfaces gráficas de usuario (GUI), solo una línea de comandos, lo que refuerza la obsesión de Orcutt con el primitivismo incluso en el ámbito digital. Con Cracked, encontró un nuevo lenguaje: basado en máquinas, pero arraigado en el error humano.
Un Joey Mecánico, ahora reprimido para una nueva generación de oyentes, utiliza ese lenguaje con pleno efecto. El álbum es una deconstrucción en bucle de 35 minutos que manipula un fragmento de Joey Ramone contando para convertirlo en una canción, superponiéndolo con ritmos de batería fragmentados y cambios temporales con fallos. Se siente como punk rock lanzado a un acelerador de partículas: hacia atrás, hacia adelante, espacialmente desorientado, pero intensamente rítmico.
Mientras que Pure Genius —su lanzamiento de Cracked de 2024— jugaba con voces generadas por computadora y cromáticas ascendentes para evocar una especie de hipnosis digital, A Mechanical Joey reintroduce algo sorprendentemente humano. Es como si Orcutt, una vez convencido de que «nosotros, la plebe, eventualmente estaremos aquí solo para servir a las máquinas», ahora insinuara un cambio. La voz —cruda, defectuosa, real— atraviesa el código procedimental. Es una resistencia.
Esta reedición de A Mechanical Joey llega en un momento en que las fronteras entre algoritmo e intención, máquina y músico, están más difusas que nunca. La obra de Orcutt no solo se asienta en esta tensión, sino que prospera en ella. Para los amantes del sonido experimental, la improvisación libre o la creciente intersección del arte y la tecnología, esto es más que una reedición. Es un documento vital de cómo uno de los músicos más intransigentes de Estados Unidos se enfrenta al futuro.
El mundo de Orcutt sigue siendo un mundo de fricción: entre cuerdas pulsadas y bucles codificados, entre la memoria punk y la recursión digital. Y con A Mechanical Joey, esa fricción arde con fuerza.
— Editorial de Santana News

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